Según Gerald Hüther, autor del ensayo Hombres, el sexo débil y su cerebro, las primeras diferencias entre el cerebro masculino y el femenino se inician en el ámbito intrauterino, aproximadamente a las 8 semanas de gestación. Antes de este momento, los embriones masculinos y femeninos son prácticamente iguales. Estas diferencias no tienen relación con la inteligencia, sino con la manera en que cada género percibe y procesa la información sensorial que ingresa al cerebro. Aunque tanto hombres como mujeres segregan andrógenos (hormonas masculinas) y estrógenos (hormonas femeninas), lo hacen en cantidades diferentes.
Teniendo en cuenta esta información, es lógico pensar que la forma en que los estímulos afectan a una mujer y a un hombre es muy diferenciada. Con este enfoque, nos centraremos en las percepciones que recibe el cerebro de nuestro público objetivo: la mujer.
MemORIA
La capacidad de memorizar es mayor en el cerebro femenino, especialmente cuando se trata de fijar recuerdos con contenidos emocionales. Además, las mujeres pueden evocar estos recuerdos de manera más rápida y durante más tiempo que los hombres.
"El cerebro de la mujer está diseñado para la empatía y la comunicación. Mientras que los hombres procesan la información de manera más centrada en la acción, las mujeres lo hacen con una capacidad superior para leer las emociones y conectarse con los demás"
EMOCIÓN
Una investigación dirigida por Thomas Crook, uno de los principales especialistas en el mundo sobre el deterioro de la memoria, en la que participaron más de 50.000 personas, demostró que las mujeres tienen una mayor capacidad para recordar listas y asociar nombres con rostros.
El cerebro femenino también está mejor estructurado para la empatía emocional, lo que facilita la expresión de sus emociones. De hecho, el cerebro femenino es superior al masculino en la cantidad de neuronas espejo, lo que lo hace más empático y comunicativo.
Aprovechar la facilidad de comunicación de las mujeres se convierte en una herramienta clave para la extracción de datos, que las marcas deben utilizar para su beneficio. Preguntar y saber escuchar al público objetivo son pilares fundamentales para el éxito de cualquier marca.
Las mujeres tienden a utilizar ambos hemisferios cerebrales cuando enfrentan tareas complejas, lo que les permite analizar situaciones de manera simultánea.
El hemisferio izquierdo del cerebro femenino es más grande que el derecho, aunque este último se reduce ligeramente durante el embarazo. Con la edad, el hemisferio derecho se ve más afectado, lo que puede impactar la memoria y la capacidad de desplazamiento.
